El Betis ha cerrado una racha de derrotas que apuntaba a superar la media docena consecutiva, sobre todo tras ver algunas de las acciones de los visitantes en la primera parte de la confrontación. Pese a ello, no perdieron los de Mel el pulso al encuentro y también gozaron de alguna que otra ocasión para desnivelar el marcador, aunque no tan claras como las de los malacitanos, que se estrellaron en un siempre seguro Casto.
Casi el mismo guión en el segundo periodo, en el que Pozuelo demostró que está llamado a ser figura en el Betis, mientras que al Málaga le bastó con oficio para cercenar las intentonas de los locales. Buen punto, en definitiva, para un equipo que ha sabido empatar un partido que no podía ganar.
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